Tompkins: "Conservación privada y de calidad"

¿Sabía Usted que Douglas Tompkins es parte del comité editorial tras PATAGONIA SIN REPRESAS?

¡¡Sí!! ¡¡¡esa misma campaña que Usted y Yo apoyamos!!!

¿Sabía Usted que Douglas Tompkins posee un Parque Anhelado por extranjeros, ya que los coterráneos no lo saben apreciar?

¡¡¡¡¡¡INFORMESE!!!!!!!

Surfeando en el internet, sobre conservación en Chile, siempre he llegado al apellido que genera escalofrios, oposición y del que se sabe muy poco: TOMPKINS.

Para quien llegue a este blog, debe saber que estoy en vias de ser Administrador en Ecoturismo de la U. Andrés Bello ( institución que si bien no despierta mi pachorra máxima, me gusta) y tanto por mi carrera, como por mis motivaciones, he llegado a involucrarme en proyectos de conservación.

Es así como entonces llegue a trabajar al Valle Chacabuco, lugar que esta siendo preparado para ser Parque Nacional, llamado Patagonia, donado por ni mas ni menos que por Doug Tompkins.

Quiero que lean este artículo, que sepan lo que se esta haciendo y su Usted aún piensa que Tompkins vino a llenarse de dinero a nuestro País, no se lo discutiré.

Sin embargo, ¿Por qué todos los lugares en Chile tienen dueño? Bueno, si hasta a la luna un compatriota se la adjudicó ¿No?

Seré breve:

Para mí no se trata de Piñera, ni Bachelet. Ni de este gobierno ni del proximo. ¿Intereses por debajo? probablemente. ¿Posiciones estratégicas? sin duda.

Si las tierras que hoy estan destinadas a conservación en manos privadas como son: Parque Pumalín, Parque Tantauco, Reserva Huilo Huilo, entre otras, estuvieran en otras manos, con otros fines como la tala para la industria maderera, grandes edificios, Hidroeléctricas masivas y un monton de otros fines ajenos a la conservación: ¿NO ESTARÍAMOS PIDIENDO A GRITOS ALGUIEN QUE LAS PROTEGIERA?

Apoyo fervientemente las tareas de conservación en general, la tarea de Tompkins específicamente también.Tuve la oportunidad de conocerlo, y si me vendió la pomada, debo decir que absolutamente SÍ LA COMPRÉ.

Muchas áreas como leerán mas abajo, volveran a las tan SOBREVALORADAS MANOS PÚBLICAS, EL ESTADO, PARA ASÍ SER PARTE "DE TODOS LOS CHILENOS"


Aquí les haré copy/paste del artículo escrito por Paulette Desormeaux Parra y que relatá bien lo que hace Tompkins y sus fundaciones y no esta ausente de oposiciones varias.


Tiene cinco grandes proyectos en el país y siete mil hectáreas en fundos privados. A diferencia de los 90, Tompkins dice tener buenas relaciones con el Gobierno y quiere donar Pumalín al Estado antes de que Piñera deje La Moneda. Pero duda que se complete la carretera austral y es uno de los creativos y financistas de la campaña Patagonia sin Represas. Revela que su esposa estudia involucrarse en el mercado de los bonos de carbono y se siente uno de los gestores del movimiento antiglobalización.

Douglas Rainsford Tompkins, 68 años, nacido en Ohio, EE.UU., casado por segunda vez y padre de dos mujeres, nunca terminó la enseñanza media ni fue a la universidad. Creador de la tienda North Face y ex dueño de Esprit, se convirtió en magnate. Es ambientalista, y de los duros: hace 20 años compra tierras con alto valor ecológico en la Patagonia chilena y en Argentina, y en ambos países se ha enfrentado a los gobiernos de turno.

Pese a que fue en los 90 cuando hizo noticia por sus polémicas compras de tierra en Palena, X Región, y aunque poco se sabe sobre cómo han crecido sus posesiones, el norteamericano nunca ha dejado de ser un activista en Chile. Vive la mitad del año en Argentina, pero su hogar está en Reñihué, dentro del parque Pumalín, en la Región de los Lagos.

El jueves 7 de julio aterriza el vuelo que lo trae a Santiago desde Buenos Aires. Viene a supervisar sus proyectos en Chile y a juntarse con otros ambientalistas. En una sala especial del restaurante vegetariano El Huerto de Providencia, alternando el inglés y español pide que le compren un chocolate y toma sorbos de agua hervida. En breve está prevista una reunión con sus colaboradores. El equipo ha participado activamente en Patagonia sin Represas, que aúna la oposición en contra de la central HidroAysén. “Yo ayudo con ideas gráficas y conceptuales de la campaña”, explica.

Pero ¿en qué anda exactamente el norteamericano? ¿Cuáles son sus proyectos y cuántas hectáreas ha comprado? ¿Quién es Tompkins hoy, tras veinte años de su primera adquisición de tierras en Chile?
500 mil hectáreas

Tompkins no sólo es parte del comité editorial tras Patagonia sin Represas: ha sido uno de los principales financistas del movimiento. “Somos unos contribuidores importantes, aunque no los únicos”, reconoce. No estaba en Chile el 13 de mayo, cuando miles de personas marcharon en protesta por la aprobación del proyecto hidroeléctrico. Pero siguió las manifestaciones por internet: “Hay una especie de revolución social que la clase política no entiende”, opina. Tompkins sabe de cambios sociales: vivió en California en los 60, y a principios de los 90 ayudó a gestar el International Forum on Globalization , crítico del paradigma económico neoliberal . “Fue una de las organizaciones seminales del movimiento antiglobalización. ¡Y empezó en el living de mi casa!”, relata.

Fue justamente hace dos décadas cuando se estableció de forma permanente en Chile y comenzó a comprar tierras en el sur, lo que generó una ardua desconfianza de la clase política. Sobre todo por las grandes extensiones que adquirió en la X Región, en lo que hoy es Pumalín.

El polémico ambientalista se convirtió en un asunto de Estado para el Gobierno de Eduardo Frei, quien junto al entonces subsecretario del Interior, Belisario Velasco (DC), exigió garantías de que el norteamericano no pusiese en jaque la soberanía en una zona estratégica. Fue en julio de 1997 cuando Tompkins firmó un compromiso, estableciendo que ni él ni personas o sociedades ligadas a él comprarían tierras de más de 4 mil hectáreas por un año. En el mismo documento, el Ejecutivo manifestó su intención de otorgarle a Pumalín la categoría de Santuario de la Naturaleza, lo cual sólo se concretó durante la administración de Ricardo Lagos. A cinco meses de vencido el acuerdo, en diciembre de 1998, Tompkins reactivó las compras financiando la adquisición de la estancia Yendegaia, en la Región de Magallanes, ubicada casi en la frontera con Argentina (ver recuadro). Desde entonces, ha comprado 85.235 hectáreas más en el país.

Junto a su esposa Kristine McDivitt, Tompkins ha participado en los últimos veinte años en seis proyectos de conservación en Chile que suman 500 mil hectáreas. Las tierras compradas -las últimas datan de 2008- se hallan entre la X y XII Región. El matrimonio asegura que las ha adquirido con un objetivo central: evitar la actividad productiva industrial -ganadera, agrícola o forestal- y restaurar los ecosistemas para luego transformarlos en parques nacionales donándolos al Estado.

De esas tierras, en 2005 Tompkins donó 85 mil hectáreas bajo el gobierno de Lagos para la formación del Parque Nacional Corcovado, en la X Región. Hoy conserva tierras en las tres regiones, todas financiadas a través de la fundación norteamericana Conservation Land Trust, que formó en 1992. Los proyectos son administrados a su vez por fundaciones chilenas a cargo de gente de su confianza: su mano derecha, Carolina Morgado, y el ecólogo Carlos Cuevas, colaboradores de Tompkins hace más de 15 años. Algunas propiedades han sido donadas a estas fundaciones. La figura se repite con su esposa y las más de 70 mil hectáreas en Valle Chacabuco, cerca de Cochrane, XI Región, que Kristine McDivitt busca convertir en el futuro Parque Nacional Patagonia (ver recuadro).

Como parte de sus propiedades privadas, los Tompkins tienen dieciséis fundos entre las regiones X y XI, que suman más de siete mil hectáreas. Sus últimas compras también son de 2008 y hoy algunos fundos están en proceso de venta (ver mapa).
Otro panorama político

El escenario que Tompkins enfrenta hoy es distinto al de la dura oposición política en los 90 (ver línea de tiempo). Quizás Tantauco, el parque privado de libre acceso de la Fundación Futuro, ligada al Presidente Piñera, sea el mejor ejemplo de la afinidad que Tompkins siente con el actual Jefe de Estado. El Mandatario compró 120 mil hectáreas en la isla de Chiloé y luego donó el terreno a la fundación para que lo administrara como un parque ecológico. “Es loable, porque estamos haciendo la misma cosa”, dice Tompkins.

El filántropo norteamericano también siente cercanía con el intendente de Los Lagos, Sebastián Montes, quien es montañista al igual que él. Según dice el ecologista, Montes es el primer jefe regional de la zona en visitar Pumalín.

Luego de aquella cita, Montes enfatizó en la necesidad de pavimentar los tramos existentes de la carretera austral, en vez de avanzar en la construcción del trecho que pasa por Pumalín. Sus declaraciones generaron polémica e incluso el ministro de Obras Públicas, Hernán de Solminihac, salió a corregir a Montes y a confirmar que el trozo faltante se realizará por el parque y que se va a ejecutar durante el actual Gobierno.

Tompkins no cree lo mismo: “No están haciendo nada, una cosa es la palabra y otra es la acción. Yo creo que en los próximos veinte años, no”, dice el ambientalista, quien espera que se privilegie una ruta costera que pueda evitar el camino por el parque. Pero Solminihac también ratificó la decisión de expropiar si es necesario. Tompkins alega: “El Estado tiene todo el derecho de expropiar. Nadie está discutiendo eso”. Pero advierte que construir en el Santuario de la Naturaleza no será tan simple: “El Estado tiene que tomar todas las medidas según la ley, porque si no van a tenernos con abogados”.

Esta semana, el director nacional de Vialidad, Mario Fernández, reconoció que aunque las bases de contratación de la licitación pública fueron enviadas a Contraloría con carácter de urgente, el plan de terminar el trayecto está atrasado en seis meses. El anuncio generó molestias entre los parlamentarios de la Comisión de Zonas Extremas del Senado, quienes citaron para mañana al Congreso a los ministros de Obras Públicas, Defensa, Mideplan y Hacienda.

Tompkins también dice tener mejores relaciones con el actual alcalde de Chaitén, Pedro Vásquez (Independiente). Donde antes tenía su más férreo opositor, el fallecido José Miguel Fritis (DC), hoy encuentra un aliado. Para el edil, el proyecto Pumalín es clave para el desarrollo de la zona, ya que espera que el turismo sustentable atraiga más visitantes a Palena.

En este nuevo contexto, y con la infraestructura del parque desarrollada, Tompkins quiere donar Pumalín al Estado para que se convierta en Parque Nacional durante el gobierno de Sebastián Piñera.

Pero los Tompkins McDivitt también trabajan en Argentina, donde sus dieciocho estancias y campos privados suman más de 190 mil hectáreas, casi 28 veces más que en Chile. Su proyecto más ambicioso es convertir Esteros del Iberá, donde tienen más de 138 mil hectáreas, en un parque nacional. Ubicado en Corrientes, al norte de Argentina, es una de las reservas de agua dulce más grandes del mundo, por lo que ha generado ardua oposición política.

Hay otros planes: Tompkins revela que su esposa ha evaluado ingresar al mercado de bonos de carbono, aún incipiente en Chile, para generar más fondos. Las empresas y los países que contaminan compran estos certificados para compensar sus emisiones de dióxido de carbono, y todo ello se transa a nivel mundial. Es un sistema criticado por algunos ecologistas, ya que finalmente no desincentiva la polución. Pero Tompkins opina que, dado que el mercado existe, los ecologistas podrían generar ingresos por esa vía para financiar más conservación.

El norteamericano además acaba de terminar un libro sobre el impacto ambiental de la producción y transmisión de energía, que proyecta publicar a fin de año. Esta semana, parte a Estados Unidos para participar como esgrimista en un campamento de la Brown University, junto a jóvenes veinteañeros.
A principios de los 90 ayudó a gestar el International Forum on Globalization que criticaba el paradigma económico neoliberal. “Fue una de las organizaciones seminales del movimiento antiglobalización. ¡Y empezó en el living de mi casa!”, relata. Pumalín: las conversaciones con el Gobierno para donar el parque al Estado

El equipo de Tompkins revela estar en conversaciones con el Gobierno para concretar la donación de Pumalín al Estado. Dicen que es el momento, ya que la infraestructura está lista, y que quieren hacerlo antes de que termine la gestión de Piñera.

Tras la erupción del volcán Chaitén en 2008, cerca de 20 mil hectáreas de bosques quedaron afectadas. El trabajo se concentró en la restauración y el embellecimiento de la zona El Amarillo. Se construyeron un supermercado y una bomba de bencina y se pintaron las fachadas de algunas casas. La idea es que El Amarillo se convierta en la puerta de entrada sur. El alcalde de Chaitén, Pedro Vásquez, es optimista respecto del parque, ya que ve la posibilidad de desarrollar Palena a través del turismo sustentable. Según Hernán Mladinic, director ejecutivo de Pumalín, el santuario hoy atrae 10 mil visitantes al año. Tompkins estima que como Parque Nacional las visitas podrían quintuplicarse. La fundación Pumalín, dueña y administradora del proyecto, tiene en su directorio a cuatro representantes de Conservation Land Trust, un representante de la Universidad Austral, uno de la Iglesia y uno del Gobierno Regional. Por primera vez, será el mismo intendente de los Lagos, Juan Sebastián Montes, quien asuma ese cargo.